El acero es uno de los metales más utilizados y reciclados en el mundo, sus características, ya mencionadas en nuestros artículos anteriores, lo convierten en un material de una utilidad inimaginable.
Al ser un metal inalterable, no pierde ninguna de sus cualidades, como lo son: la resistencia, la dureza o la maleabilidad, después de los procesos de reciclado. Por lo que se puede reciclar tantas veces como se desee.
Proceso del reciclaje del acero
Una vez que el acero ha concluido su vida útil pasa a ser un residuo que recibe el nombre de chatarra. La finalidad del reciclado de acero es doble, por un lado nos permite reducir el consumo de materias primas, y por otro se consigue un ahorro energético, pues el proceso de obtención de acero a partir del mineral de hierro supone un gasto elevadísimo de energía.
1. La chatarra generada se prensa formando grandes paquetes compactos que son transportados a las industrias que van a reciclar el metal.
2. Son fundidos en hornos especiales, a continuación son incorporados al proceso siderúrgico de producción de acero. Su fusión es junto con el hierro fundido a unos 1700 °C.
3. La mezcla se convierte en metal líquido, luego se convierte en grandes bloques, que a continuación se enrollan. Estas bobinas se cortan según las especificaciones y son entregadas a los clientes industriales como materia prima.
El reciclaje del acero puede traducirse en importantes cifras a favor del planeta, por lo que no sólo representa un ahorro económico, sino un paso más para la creación de un mundo más ecológico.
En Ulbrinox estamos conscientes de la situación que está afrontando el planeta, por eso nos enorgullece que nuestra materia prima es parte de la solución para un mundo mejor. Para más información sobre nuestros productos de acero inoxidable, no dudes en contactarnos.